Mi estancia en Farmhotel Efstidalur fue maravillosa. Estuve alojado en una cabaña espaciosa y confortable con una cama muy cómoda y vistas excepcionales. Además, el aparcamiento estaba justo al lado de la cabaña. El desayuno era delicioso, con unas tortitas caseras exquisitas, y en la cena pude disfrutar de carne de la misma granja, así como de unos helados caseros riquísimos. El personal del hotel fue amable y atento en todo momento. Además, la ubicación del hotel era perfecta, a pocos minutos de las cascadas de Bruarfoss, a 15 minutos en coche de las termas de Laugarvatn y a menos de 40 minutos de Silfra y Thingvellir. estaba a solo 15 minutos de Geysir y Gulfoss, lo que lo hacía ideal para visitar estos lugares. Las instalaciones del hotel eran preciosas y el almuerzo espectacular.

Os recomiendo este fantástico lugar.

Farmhotel Efstidalur nos encantó. Las cabañas eran grandes, acogedoras y bien equipadas, con un buen baño y suelo calentado. El restaurante y el desayuno eran excelentes, con recetas tradicionales islandesas y productos frescos de la granja. Además, las vistas del valle desde la habitación eran espectaculares. El personal fue muy amable y las hamburguesas de carne propia eran excelentes. ¡No pudimos encontrar nada malo! 😊

La mezcla de granja con alojamiento de calidad funciona bien. Desayunar con vistas al establo lleno de animales es una idea original. Helados y desayuno tradicionales muy buenos. Vistas del valle desde la habitación son excelentes.

nuestra segunda estancia en laugarvatn fue aún mejor gracias a farmhotel efstidalur. el personal siempre amable y atento. las habitaciones espaciosas y cómodas, con bonitas vistas. la comida del restaurante deliciosa, especialmente los helados caseros. ¡una experiencia genial para parejas y familias, especialmente con niños! el detalle de las aguas termales gratis por el corte de agua caliente fue increíblemente amable.

precio algo elevado en comparación con otros hoteles de la zona.

Una estancia inigualable en Farmhotel Efstidalur! Tuve la suerte de disfrutar de unas magníficas vistas del campo y presenciar las Auroras Boreales. Las habitaciones eran preciosas y estaban impecables, el personal era increíblemente atento y los helados artesanales eran deliciosos. Sin mencionar que en el restaurante sirven una de las mejores hamburguesas que he probado. ¡Simplemente perfecto y definitivamente volvería!

Increíble. Cabaña con todas las comodidades en una granja. El restaurante donde cenar y desayunar genial. Cafeteria muy agradable con vistas a las cuadras. Y los helados, buenisimos. Repetiria sin dudarlo. Y la ubicación, perfecta a medio camino entre Geysir y Pingvellir. Habitación grande, cama cómoda, con lavabo dentro de la habitación. En el baño compartido la ducha se encuentra independizada del inodoro. Limpieza ok y calefacción perfecta. Ambiente agradable. El entorno es una pasada con vistas bonitas desde la habitación. Hay un restaurante que ofrece desayuno y también cenas. Habitación enorme y acogedora. y estar hospedados en la granja toda una experiencia. Desayuno bien de precio y muy bueno. El sitio es precioso, es una granja con animales que tiene casitas en el exterior muy bien preparadas y decoradas para los huéspedes. El lugar nos ha encantado y lo que más, es que el suelo estaba calentado! La comida en el restaurante muy buena también.

Me encantó todo en este lugar. Primero, las hamburguesas caseras eran simplemente deliciosas, y el helado casero también era increíble. Además, los precios eran bastante razonables considerando lo caro que es Islandia en general. Otro aspecto destacado fue la amabilidad del personal, siempre dispuesto a ayudar y ofrecer recomendaciones.

Lo que menos me gustó fue que la hora de check-in era hasta las 19:00, lo cual me pareció un poco temprano, especialmente para un lugar tan turístico. Además, cuando nos dieron la habitación, aún no estaba completamente limpia y tuvimos que esperar mientras terminaban de limpiarla.

Increíble ubicación y vistas, comodidad en la cabaña, restaurante delicioso, helados deliciosos, ambiente agradable.

No.

Increíblemente acogedor y encantador. Las cabañas de madera son muy cómodas y calientes, y las vistas son excepcionales. Además, la comida es deliciosa, especialmente las hamburguesas caseras y los helados elaborados por ellos mismos. Recomiendo probarlos.

El desayuno podría tener más variedad, como opciones de huevos revueltos o fritos, beicon y una selección más amplia de frutas. Además, la ducha del baño es un poco pequeña.

Nos alojamos en Farmhotel Efstidalur y tuvimos una experiencia increíble. El personal fue muy amable y nos ofrecieron una visita a las aguas termales del pueblo vecino debido a un corte de agua caliente en Laugarvatn. Además, nos permitieron entrar en los establos con nuestro hijo, lo cual fue muy emocionante para él. degustamos unos helados deliciosos. El hotel es muy recomendable para parejas y familias, y la habitación estaba impecablemente limpia.

Nada de nada 👍.

Desayunar con vacas a nuestro alrededor fue la experiencia más auténtica que hemos tenido. Los helados caseros estaban deliciosos y el desayuno con productos frescos de la granja nos cargaba de energía. Además, ¡las vistas desde nuestra habitación eran impresionantes!

Nos faltó más diversión para jóvenes fiesteros!

Me encantó el valor que obtuve por mi dinero en Farmhotel Efstidalur. La cabaña era increíble y tenía todas las comodidades que necesitaba. Además, la ubicación era perfecta, justo a medio camino entre Geysir y Pingvellir. El personal fue amable y encantador, incluso nos permitieron visitar los establos con nuestro hijo. Sin mencionar los helados deliciosos que hacen.

La experiencia del desayuno podría haber sido mejor. Aunque todo estaba muy bueno, hubiera sido más conveniente si los helados elaborados por ellos estuvieran disponibles directamente en el restaurante, en lugar de tener que bajar a la heladería y encargarnos nosotros mismos.

habitación amplia, cama cómoda, personal muy amable. Hamburguesas de carne propia excelentes. Ambiente agradable, vistas bonitas desde la habitación. Restaurante con desayuno y cenas deliciosas. Cerca de cascadas, termas y Silfra. Todo perfecto, vale mucho la pena.

baño olía a cañería. cortina de baño no nos gustó, preferimos una mampara.

Lo mejor de mi escapada a este hotel fue el entorno increíble en el que está ubicado. A pocos minutos de Geysir y Gulfoss, pude disfrutar de vistas espectaculares del valle desde mi habitación. Además, el hecho de estar en una granja en funcionamiento añadió un toque especial a mi estancia. Desayunar con vistas a un establo lleno de vacas fue una experiencia única. disfruté mucho de los helados caseros y de las tortitas del desayuno, que eran deliciosas. Otra ventaja que aprecié fue la amabilidad y atención del personal.

En cuanto a los aspectos negativos, me resultó un poco caro el desayuno, ya que me hubiera gustado tener más opciones como huevos revueltos o fruta más variada. Además, la ducha del baño era un poco pequeña.